Versos

El diluvio universal

escrito por Moisés* en Génesis 6:5-9:17, ~8 mins

5 Entonces Yavé vio que la perversidad del hombre se multiplicó en la tierra, y que toda forma de pensamiento de su corazón era solamente el mal continuamente. 6 Yavé sintió pesar de haber hecho al ser humano en la tierra y se entristeció su corazón.

7 Y Yavé dijo: Borraré de sobre la superficie de la tierra a los seres que creé, desde el humano hasta la bestia, el reptil y las aves de los cielos, pues me pesa haberlos hecho.

8 Pero Noé halló gracia ante los ojos de Yavé.

9 Estos son los descendientes de Noé.

Noé, varón justo, fue sin defecto en sus generaciones. Noé andaba con ʼElohim. 10 Noé engendró tres hijos: Sem, Cam y Jafet.

11 Se corrompió la tierra en la Presencia de ʼElohim, y se llenó la tierra de violencia.

12 ʼElohim vio la tierra, y ciertamente estaba corrompida, porque toda carne corrompió su camino sobre la tierra. 13 Y ʼElohim dijo a Noé: Decidí el fin de todo ser viviente. Porque la tierra se llenó de violencia a causa de ellos. Mira, Yo los destruyo con la tierra.

14 Haz un arca de madera de ciprés. Harás compartimientos al arca y la calafatearás con brea por dentro y por fuera. 15 Y de esta manera la harás: 135 metros será la longitud del arca, 22,5 metros su anchura, y 13,5 metros su altura. 16 Harás una claraboya al arca y la terminarás a 45 centímetros de la parte alta. Pondrás una puerta en un lado del arca, y le harás planta baja, segunda y tercera.

17 Y mira, yo traigo un diluvio de aguas sobre la tierra para destruir toda carne en la cual hay aliento de vida bajo el cielo. Todo lo que hay en la tierra perecerá.

18 Pero estableceré mi Pacto contigo. Entrarás en el arca, tú y tus hijos, tu esposa y las esposas de tus hijos.

19 También harás entrar en el arca dos de cada ser viviente de toda carne para que sobrevivan contigo. Serán macho y hembra. 20 De las aves, según su especie. De las bestias, según su especie. De todo reptil del suelo, según su especie. Dos de cada especie irán a ti para sobrevivir. 21 Y toma para ti de todo alimento para comer y almacénalo contigo, pues será sustento para ti y para ellos.

22 Noé hizo conforme a todo lo que le ordenó ʼElohim. Así hizo.

7 Yavé dijo a Noé: Entra tú y toda tu casa en el arca, porque te he visto justo delante de Mí en esta generación. 2 De todo animal limpio tomarás contigo siete pares, macho y su hembra, pero del animal que no es limpio tomarás dos, el macho y su hembra. 3 También tomarás de las aves del cielo, de siete en siete, macho y hembra, para preservar la descendencia sobre la superficie de toda la tierra. 4 Porque dentro de siete días Yo enviaré lluvia sobre la tierra durante 40 días y 40 noches, y arrasaré de la superficie de la tierra todo ser viviente que hice.

5 Noé hizo conforme a todo lo que Yavé le ordenó. 6 Noé tenía 600 años cuando el diluvio de aguas vino sobre la tierra.

7 Ante las aguas del diluvio, Noé entró en el arca, y con él sus hijos, su esposa y las esposas de sus hijos. 8 De los animales limpios y de los animales no limpios, de las aves, y de todo lo que repta sobre la tierra, 9 de dos en dos llegaron a Noé, al arca, macho y hembra, según ʼElohim ordenó a Noé. 10 Sucedió que a los siete días, las aguas del diluvio vinieron sobre la tierra.

11 El año 600 de la vida de Noé, en el día 17 del segundo mes, reventaron todas las fuentes del gran abismo. Las compuertas del cielo fueron abiertas 12 y vino la lluvia sobre la tierra 40 días y 40 noches.

13 Ese mismo día Noé entró en el arca con Sem, Cam y Jafet, hijos de Noé, la esposa de Noé y las tres esposas de sus hijos con ellos. 14 Ellos, toda bestia salvaje según su especie, todo animal según su especie, todo reptil que repta sobre la tierra según su especie, toda ave según su especie, y todo pájaro, todo alado. 15 Llegaron a Noé, al arca, de dos en dos, de toda carne en la cual había aliento de vida. 16 Los que llegaron, macho y hembra de toda carne, entraron tal como ʼElohim lo ordenó. Y Yavé le cerró la puerta.

17 Vino el diluvio sobre la tierra durante 40 días. Las aguas crecieron y levantaron el arca. Ésta se elevó sobre la tierra. 18 Las aguas crecieron muchísimo sobre la tierra. Flotaba el arca sobre la superficie de las aguas. 19 Las aguas crecieron mucho por encima de la tierra, de modo que quedaron cubiertas todas las altas montañas que están debajo de todo el cielo. 20 Las montañas quedaron cubiertas, y las aguas subieron 6,75 metros por encima de ellas.

21 Pereció toda carne que se movía sobre la tierra, tanto aves como ganado, bestias y todo lo que se arrastra sobre la tierra, y todo ser humano. 22 Todo lo que tenía aliento de vida en sus fosas nasales, todo lo que vivía en tierra seca, murió. 23 Arrasó todo lo que existía sobre la superficie de la tierra. Desde el hombre hasta la bestia, los reptiles y las aves del cielo fueron exterminados de la tierra.

En el arca solo quedaron Noé y los que estaban con él.

24 Prevalecieron las aguas sobre la tierra 150 días.

8 Entonces ʼElohim se acordó de Noé, de todo ser viviente y de todos los animales que estaban con él en el arca. Y ʼElohim hizo soplar un viento sobre la tierra y las aguas decrecieron.

2 Las fuentes del abismo y las compuertas de los cielos fueron cerradas, y la lluvia del cielo fue detenida. 3 Entonces las aguas retrocedían de sobre la tierra, iban y venían. Al completarse los 150 días las aguas disminuyeron.

4 El día 17 del mes séptimo, el arca se posó sobre las montañas de Ararat. 5 Las aguas siguieron en descenso hasta el décimo mes. El primer día del décimo mes se descubrieron las cumbres de las montañas.

6 Ocurrió después de 40 días que Noé abrió la ventana que hizo en el arca. 7 Envió un cuervo, el cual iba y regresaba hasta que se secaron las aguas de sobre la tierra. 8 Luego envió una paloma para ver si las aguas de la superficie de la tierra habían menguado. 9 Pero la paloma no halló lugar de reposo, y volvió a él, al arca, porque había agua sobre la superficie de toda la tierra. Entonces él extendió su mano, la tomó y la introdujo consigo en el arca.

10 Esperó ansiosamente aún otros siete días, y volvió a enviar la paloma desde el arca. 11 La paloma volvió a él por la tarde y llevó una hoja fresca de olivo en su pico. Así Noé entendió que las aguas habían menguado de sobre la tierra.

12 Esperó ansiosamente aún otros siete días y envió la paloma, la cual no volvió más a él.

13 Aconteció que el primer día del primer mes del año 601, las aguas comenzaron a drenar de sobre la tierra. Entonces Noé ordenó apartar la cubierta del arca y, al mirar, observó que la superficie de la tierra estaba seca. 14 El día 27 del segundo mes, la tierra quedó seca.

15 Entonces ʼElohim habló a Noé: 16 Sal del arca, tú y contigo tu esposa, tus hijos y las esposas de tus hijos. 17 Saca todos los animales de toda especie que están contigo: las aves, el ganado y los reptiles que se arrastran sobre la tierra para que vayan por la tierra, sean fecundos y se multipliquen.

18 Noé salió, y con él sus hijos, su esposa y las esposas de sus hijos. 19 Salieron del arca todos los animales, todos los reptiles, todas las aves y todo lo que se mueve sobre la tierra, según su especie.

20 Noé construyó un altar a Yavé. Tomó de todo animal limpio y toda ave limpia, y ofreció holocaustos sobre el altar.

21 Yavé percibió el grato olor y dijo en su corazón: No volveré jamás a maldecir la tierra por causa del hombre, porque la inclinación del corazón del hombre es perversa desde su juventud. No volveré, por tanto, a cortar a todo ser viviente como hice.

22 Mientras permanezca la tierra, No cesarán la siembra y la cosecha, El frío y el calor, el verano y el invierno, Y el día y la noche.

9 ʼElohim bendijo a Noé y a sus hijos, y les dijo: Sean fecundos y multiplíquense y llenen la tierra. 2 El temor y pavor de ustedes sea sobre todos los animales de la tierra, sobre todas las aves del cielo, sobre todo lo que se mueve en la tierra y sobre todos los peces del mar. En sus manos son entregados. 3 Todo lo que se mueve y vive les servirá de alimento, y también la hierba verde. Se lo di todo.

4 Solo no comerán carne con su vida que es su sangre, 5 pues ciertamente demandaré la sangre de ustedes. La demandaré de mano de todo ser vivo. De mano del hombre y de cualquier hermano suyo demandaré la vida del hombre.

6 El que derrame sangre de hombre, su sangre será derramada por los hombres, porque a imagen de ʼElohim hizo ʼEL al hombre. 7 Y ustedes, sean fructíferos y multiplíquense. Reprodúzcanse en la tierra y multiplíquense en ella.

8 ʼElohim habló a Noé y a sus hijos que estaban con él: 9 Miren, Yo establezco mi Pacto con ustedes, y después de ustedes, con sus descendientes, 10 y con todo ser vivo que está con ustedes: aves, ganado y todos los animales terrestres que están con ustedes, todos los que salieron del arca, todos los animales de la tierra.

11 Estableceré, pues, mi Pacto con ustedes: Ya no será aniquilada alguna carne por las aguas del diluvio. Ya no habrá diluvio para destruir la tierra.

12 Y ʼElohim dijo: Les doy esta señal del Pacto entre Yo y ustedes y todo ser viviente que está con ustedes, por generaciones perpetuas: 13 Pondré mi arco en las nubes y será la señal del Pacto entre Yo y la tierra. 14 Pues sucederá que cuando Yo cubra la tierra con nubes, entonces aparecerá el arco en las nubes, 15 y me acordaré de mi Pacto entre Yo y ustedes y todo ser viviente de toda carne. No habrá más aguas de diluvio para destruir a todo ser vivo.

16 Cuando el arco aparezca en las nubes, lo miraré para recordar el Pacto eterno entre ʼElohim y todo ser viviente de toda carne que está sobre la tierra.

17 Luego ʼElohim dijo a Noé: Esta es la señal del Pacto que establezco entre Yo y toda carne que hay sobre la tierra.