Versos

La crucifixión de Jesús

escrito por Juan (un discípulo)* en Juan 19:16-42, ~3 mins

16 Así que Pilato se lo entregó para que lo crucificaran. Entonces se llevaron a Jesús.

17 Él mismo cargó la cruz y salió hacia el Lugar llamado Calavera, que en hebreo es Gólgota. 18 Allí lo crucificaron, y a otros dos con Él, uno a cada lado, y a Jesús en el medio.

19 Pilato también escribió y colocó sobre la cruz un letrero: Jesús nazareno, Rey de los judíos.

20 Muchos de los judíos leyeron este letrero escrito en hebreo, latín y griego, porque el lugar donde Jesús fue crucificado estaba cerca de la ciudad.

21 Los principales sacerdotes de los judíos dijeron a Pilato: No escribas: Rey de los judíos, sino aquel que dijo: Soy Rey de los judíos.

22 Pilato respondió: Lo que he escrito está escrito.

23 Cuando los soldados crucificaron a Jesús, tomaron sus ropas y las repartieron en cuatro partes, una parte para cada soldado, excepto la túnica porque era sin costura tejida por completo desde arriba.

24 Entonces se dijeron unos a otros: No la rasguemos, sino echemos suertes sobre ella a fin de saber de quién será, para que se cumpliera la Escritura:

Se repartieron mis ropas entre ellos,

Y sobre mi manto echaron suerte.

Así pues, los soldados hicieron estas cosas.

25 Delante de la cruz de Jesús estaban en pie su madre, la hermana de su madre, María, la esposa de Cleofas y María Magdalena.

26 Entonces Jesús, al ver a su madre y al discípulo a quien amaba, que estaba en pie junto a ella, dijo a su madre: ¡Mujer, ahí está tu hijo!

27 Después dijo al discípulo: ¡Ahí está tu madre! Desde aquella hora el discípulo la recibió en su hogar.

28 Después de esto, como Jesús sabía que ya todo se había consumado, para que se cumpliera la Escritura, dijo: Tengo sed.

29 Estaba allí una vasija llena de vinagre. Entonces sujetaron alrededor de un hisopo 19.29 Hisopo: escobilla de cerdas atada a la punta de una varita. una esponja empapada en vinagre, y la llevaron a su boca.

30 Jesús probó el vinagre y dijo: Fue consumado. Al inclinar la cabeza, entregó el espíritu.

31 Entonces los judíos rogaron a Pilato que se les quebraran las piernas y fueran quitados, por cuanto era el día de la Preparación, para que los cuerpos no permanecieran en la cruz en sábado, pues aquel sábado era grande.

32 Los soldados fueron y quebraron las piernas de los dos crucificados con Él. 33 Pero al llegar a Jesús, como lo vieron ya muerto, no le quebraron las piernas. 34 Sin embargo, uno de los soldados le abrió el costado con su lanza, y al instante salieron sangre y agua.

35 El que vio da testimonio, y su testimonio es verdadero. Él sabe que dijo la verdad, para que también ustedes crean. 36 Porque estas cosas sucedieron para que se cumpliera la Escritura:

No será quebrado hueso suyo.

37 Además otra Escritura dice:

Mirarán al que traspasaron.

38 Después de estas cosas, José de Arimatea, discípulo oculto de Jesús por miedo a los judíos, pidió a Pilato el cuerpo de Jesús. Y Pilato le permitió. Fue y se llevó el cuerpo.

39 También llegó Nicodemo, quien visitó a Jesús de noche, y llevó una mezcla de mirra y áloe como de 45 kilogramos.

40 Tomaron el cuerpo de Jesús y lo envolvieron en lienzos con las especias aromáticas, según es costumbre de los judíos para sepultar.

41 En el lugar donde fue crucificado había un jardín y un sepulcro nuevo en el cual nadie había sido puesto. 42 Allí pusieron a Jesús por causa de la Preparación de los judíos, porque el sepulcro estaba cerca.